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lunes, 30 de noviembre de 2015

Venus y Adonis, Tiziano

Tiziano, Venus y Adonis, 1554. Museo Nacional del Prado
Esta obra forma parte de un conjunto de obras, conocidas como las Poesías, encargadas por Felipe II a Tiziano y que decoraron las estancias privadas del monarca en el Alcázar de Madrid. El encargo consistía en la realización de un conjunto de pinturas de temática mitológica basadas en las Metamorfosis de Ovidio.

lunes, 23 de noviembre de 2015

El Descendimiento, Rogier van der Weyden

Rogier van der Weyden, El Descendimiento, antes de 1443. Museo Nacional del Prado
La pintura, como su título indica, representa el descendimiento del cuerpo muerto de Cristo de la cruz. Esta obra tiene mucho en común con otras pinturas que representan la misma escena: aparecen los mismos personajes y se traslada el cuerpo de Jesús envuelto en una sábana blanca como muestra de respeto y de su condición divina. Sin embargo, van der Weyden quiere mostrar no sólo la muerte de Cristo en la cruz, sino también la Compassio Mariae, el sufrimiento padecido por la Virgen al presenciar la muerte de su hijo.

miércoles, 28 de mayo de 2014

La fuerza del destino

Si existiera una posibilidad real de conseguirlo, ¿os gustaría que os predijesen el futuro y os advirtieran de lo que os tiene preparado la vida? En la mitología clásica encontramos varios ejemplos de lo que puede ocurrir cuando te predicen el futuro.

Hécuba, reina de Troya, estando embarazada tuvo un sueño en el que daba a luz a una antorcha que incendiaría la ciudad, simbolizando que sería el hijo que llevaba dentro quien causaría la ruina de Troya. Nada más nacer, el rey Príamo ordenó a su criado Agelao que abandonara al pequeño Paris, pero el criado se apiadó del bebé y decidió criarlo a escondidas, mientras que sus padres lo daban por muerto.

domingo, 16 de marzo de 2014

¿Quieres ser original?

Hoy en día la originalidad parece ser el valor que más importa a la hora de analizar la calidad de una obra de arte. Este concepto que tenemos sobre la originalidad puede llegar a ser un poco peligroso: pensamos que ser original es hacer algo nuevo, completamente distinto a todo lo que han hecho otros con anterioridad. Da igual lo que hagas, pero que sea diferente.

Damien Hirst, Away from the Flock (Divided). 1995.

jueves, 27 de febrero de 2014

Impresionistas cansinos

Queráis admitirlo o no, los impresionistas empiezan a ser ya un poco cansinos. Y no porque Manet, Monet, Pisarro, Renoir y demás no fueran buenos pintores, sino porque en los últimos –digamos– 10 años galerías y museos han sobreexplotado su pintura: durante este tiempo se han organizado al menos dos exposiciones anuales sobre el movimiento o alguno de los pintores impresionistas.

Si no lo creéis, aquí tenéis las fechas de las exposiciones sobre el impresionismo organizadas solamente en Madrid en los últimos 4 años:

2013: Museo Thyssen: Pisarro; Fundación Mapfre: Impresionistas y Postimpresionistas: el nacimiento del arte moderno; Museo Thyssen: Impresionismo y aire libre. De Corot a Van Gogh.

2012: Museo Thyssen: Berthe Morisot: La pintora impresionista;

2011: Museo Thyssen: Jardines impresionistas; Museo del Prado: Pasión por Renoir.

2010: Museo Thyssen: Monet y la abstracción; Fundación Mapfre: Impresionismo.

Todo esto, unido a las clásicas láminas con paisajes de Monet disponibles en toda tienda de decoración listas para enmarcar y colgar en tu salón. Y no hemos hablado todavía del merchandising.

Cuando me disponía a escribir esta entrada, comencé una conversación en Twitter con Cristina Alonso sobre este tema, y de ahí surgió la idea de realizar esta colaboración. Cristina aportó la mayor parte de las ideas del discurso, así que he pensado que lo mejor es que ella misma os las cuente, copiando a continuación el texto de su intervención.

viernes, 10 de enero de 2014

Música callada

 
El año pasado tuve la suerte de poder acudir a una de las conferencias que, dentro del curso Enfoques organizado por la Fundación de Amigos del Museo del Prado, impartió la profesora María Nagore. Bajo el título “Música callada”, la conferencia trataba sobre las similitudes entre la obra del Greco y la del compositor Tomás Luis de Victoria.

La clase tuvo lugar a “pie de obra”, frente a la Adoración de los pastores pintada por el Greco en torno a 1614, y su fin era mostrarnos los paralelismos que hay entre esta obra y la composición O magnum misterium de Tomás Luis de Victoria, haciéndonos ver la “música callada” de la pintura.


El Greco. La Anunciación (detalle), 1597-1600. Museo del Prado

martes, 26 de noviembre de 2013

Las niñas de Velázquez

Velázquez fue nombrado pintor real en 1623; desde entonces una de sus principales ocupaciones será retratar a la Familia Real, lo que lógicamente significaba estar en un trato continuo con cada uno de sus miembros. La exposición que se muestra ahora en el Museo del Prado está dedicada a los retratos realizados por Velázquez desde 1651, fecha en la que regresa de su segundo viaje a Italia, hasta el final de su vida en 1660.

Felipe IV estuvo casado dos veces: y tuvo muchos hijos con sus dos mujeres, pero sólo cinco de ellos fueron retratados por Velázquez ya que los otros fallecieron siendo aún demasiado niños. Con su primera mujer, Isabel de Borbón, tuvo a Baltasar Carlos (fallecido en 1646) y a María Teresa; con su segunda mujer, Mariana de Austria, tuvo a Margarita, Felipe (fallecido en 1661) y al futuro rey Carlos II.

Velázquez conoció a todos ellos desde la cuna, y le fue encargado retratarlos desde niños. En la exposición del Museo del Prado se tratan varios temas, pero lo que a mí más me ha gustado es el cariño que se trasluce en los retratos que el pintor realiza de las infantas.


Diego Velázquez, La infanta María Teresa. 1653. Metropolitan Museum of Art.

miércoles, 30 de octubre de 2013

El castigo eterno

Una de las formas mejores y más interesantes de conocer una cultura es adentrarse en sus creencias, y en concreto en su visión del "más allá", de las recompensas y castigos que se pensaba las personas encontraban tras la muerte.

En el caso de las culturas antiguas, se puede conocer la evolución de una sociedad por los cambios que experimentan sus relatos mitológicos, que siempre se adecúan a los valores morales que se predican en cada momento.Por ejemplo, el hecho de que en el yacimiento de una determinada población se encuentren restos de sepulcros o tumbas significa que en esa cultura se creía en una vida tras la muerte, lo que llevaba a preservar el cuerpo de los seres queridos.

En la mitología grecorromana ya en época Arcaica se comenzó a creer que las personas al morir no se quedaban en la tierrra, sino que viajaban a otro mundo. Por esa razón, al enterrar a sus difuntos les ponían en la boca una moneda que les serviría para pagar el viaje en la barca de Caronte por la laguna Estigia hasta el Infierno.
 
J. Patinir. Paso de la laguna Estigia. 1519-1524. Museo del Prado

lunes, 28 de octubre de 2013

Mengs y Azara. El retrato de una amistad

José Nicolás de Azara, Antón Rafael Mengs.
Óleo sobre tabla, 77 x 61,5 cm, 1774. Madrid, Museo Nacional del Prado
El Museo de El Prado ha llevado a cabo la exposición de una serie de obras sobre los artistas Antón Rafael Mengs y José Nicolás de Azara, con motivo de la reciente adquisición por parte del Estado del retrato de José Nicolás de Azara realizado por el primero de los artistas mencionados en 1774.

         El retrato refleja el carácter íntimo y personal de Azara, que fue el diplomático español en Roma, durante los años de 1730 y 1804, y embajador de España ante Francia en la época de Napoleón.

No obstante, este retrato se acompaña de una serie de veinticuatro obras antiguas pertenecientes a la colección privada de Azara, quien, amante de las antigüedades, había participado en dos excavaciones arqueológicas. Estas colecciones fueron donadas a su muerte al monarca español Carlos IV, que acabarían siendo repartidas entre la Casa del Labrador de Aranjuez y el Museo de El Prado.

Roma en el bolsillo. Cuadernos de dibujo y aprendizaje artístico en el siglo XVIII.

“Traerán siempre consigo libros de memoria en que apuntar las obras más dignas que encuentren en los templos, palacios, jardines y fuentes, y los adornos antiguos y modernos donde quiera que los hallen.”
            Esta cita que recoge las instrucciones que los pensionados recibieron por parte de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando antes de partir a su viaje a Roma, resume magistralmente el contenido de la exposición que, en el edificio de la ampliación realizada por Moneo en el Museo de El Prado, se exhibe estos días.
Alegoría de las Artes, José del Castillo.
Cuaderno italiano I, p. 3, 1762, Madrid, Museo Nacional del Prado
Entre 1758 y 1764, un grupo de ocho artistas españoles acudieron a una de las ciudades que desde la Antigüedad había sido un foco constante de atracción artística: Roma.  La finalidad del viaje no fue otra que la de la formación íntegra de los mismos, -en sus distintas disciplinas: escultura, arquitectura y pintura-, en los conocimientos artístico estéticos de la Antigüedad, del Renacimiento y del Barroco. Así, arquitectos como Juan de Villanueva y Domingo Antonio Lois, escultores como Antonio Primo e Isidro Carnicero y los pintores José del Castillo, Mariano Salvador Maella o Antonio Martínez Espinosa, fueron enviados a la capital italiana.
           

lunes, 23 de septiembre de 2013

Murillo



Como mis compañeras de museo de este año pasado bien saben, he emprendido desde hace un tiempo una campaña “pro-Murillo”. Todo comenzó por un curso de verano en el Museo del Prado al que asistí. He de confesar que al comienzo no estaba muy interesada en el tema, pero me apunté principalmente por dos razones: en primer lugar porque Murillo era uno de los temas de las oposiciones que estaba estudiando en ese momento; y en segundo lugar porque el curso era barato.

Yo, al igual que mucha gente, pensaba que Murillo era un buen pintor –de eso no se podía dudar- pero un tanto secundario, nada comparable a los grandes maestros de la escuela española. Lo que más me rechinaba de su obra era su iconografía: las escenas de “San Juanitos” y “Niños Jesuses” demasiado acaramelados para mi gusto y que aparecían en cualquier estampita de abuela. Además, siempre relacionaba sus cuadros con el amarillo, un tono ocre que aparecía en todas sus obras y que me repelía visualmente.

jueves, 19 de septiembre de 2013

Sala 12

Todo empezó en torno a una mesa…

La mesa en la que trabajábamos en el Museo del Prado, donde no sólo pasamos largas tardes de conversaciones, sino también en la que surgió nuestra amistad. De ella, poco a poco, nació la idea de crear un blog donde plantear y compartir nuestras reflexiones sobre lo que sabemos y más nos apasiona: el arte y la historia, en definitiva: la cultura.

Una vez forjada la idea, se nos presentó nuestro primer reto: encontrar el nombre idóneo para el blog. Tras numerosos nombres e infinitas listas, la idea cobró nombre: Sala 12.